Cómo usar la auditoría como herramienta de planificación 2026

Profesional trabajando en laptop representando el uso de la auditoría como herramienta de planificación empresarial

Planificar un nuevo año siempre obliga a mirar hacia atrás. Pero revisar el pasado no significa quedarse atrapado allí; significa escarbar lo suficiente para encontrar señales, patrones, decisiones que funcionaron… y otras que solo sobrevivieron por inercia. La auditoría, vista desde ese ángulo, deja de ser un trámite regulatorio y empieza a convertirse en una herramienta poderosa para construir el 2026 con más claridad y menos improvisación.

1. Qué información útil entrega una auditoría

Una auditoría bien hecha no es una colección de observaciones sueltas. Es un espejo incómodo, pero tremendamente valioso, que revela cómo se están moviendo los flujos reales, dónde se esconden los riesgos y qué procesos están sosteniendo más peso del que deberían.

Suele entregar tres tipos de información que rara vez se aprovechan como corresponde:

  • Desviaciones estructurales: pequeñas inconsistencias que anticipan problemas más grandes.
  • Patrones operativos: hábitos financieros que se repiten año tras año y limitan la eficiencia.
  • Oportunidades ocultas: costos mal asignados, procesos duplicados o controles que pueden automatizarse.

Si una empresa se toma el tiempo de leer este material con mente estratégica, ya tiene medio camino hecho.

2. Cómo ayuda a mejorar la toma de decisiones

La mayoría decide sobre intuiciones “con experiencia”. Suena bonito, pero también deja espacio para sesgos y apuestas arriesgadas. La auditoría, en cambio, aporta esa capa de objetividad que ordena la conversación.

Cuando se internalizan sus resultados, la toma de decisiones cambia en tres planos:

  • Se reduce la incertidumbre: no todo es predecible, pero sí más calculable.
  • Aparecen límites claros: qué se puede hacer, qué no, y qué requeriría ajustar.
  • Mejora la priorización: no todo requiere acción inmediata; la auditoría ayuda a distinguir entre ruido y urgencia real.

En otras palabras, convierte discusiones abstractas en decisiones sostenidas por evidencia.

3. Alineación entre estrategia, KPIs y control financiero

Aquí es donde muchas empresas tropiezan: diseñan la estrategia por un lado, definen los KPIs por otro y dejan el control financiero como un control remoto olvidado en la mesa.

La auditoría obliga a poner todo sobre la misma mesa. Revela si los KPIs están midiendo lo correcto, si la estrategia tiene respaldo numérico real o si los controles financieros están desalineados con las metas del negocio.

El resultado ideal, y no siempre alcanzado, es un tablero de control donde:

  • La estrategia marca el rumbo.
  • Los KPIs verifican el avance.
  • El control financiero asegura que el camino sea sostenible.

Sin esa alineación, planificar 2026 es básicamente un acto de fe.

4. El aporte de AHD como partner estratégico, no solo técnico

AHD podría limitarse a cumplir la norma y entregar un informe impecable. Pero ahí no estaría la diferencia. El valor real aparece cuando entra como partner, no como proveedor.

Eso implica:

  • Traducir hallazgos técnicos a insights de negocio.
  • Proponer mejoras concretas en procesos y controles.
  • Acompañar a la empresa en la interpretación de la información.
  • Ayudar a que el informe no termine guardado en una carpeta, sino convertido en decisiones prácticas para el año siguiente.

La auditoría no cambia nada si se queda en PDF. Cambia cuando hay alguien que ayuda a usarla.

Cierra 2025 con visión. Agenda tu auditoría con AHD (https://ahd.cl/) y planifica 2026 con datos confiables.

Gonzalo de la Fuente

Gonzalo de la Fuente L.

Socio

Después de graduarme como Contador Auditor en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, continué con estudios en Diplomados en NIIF e hice el Magíster en Gestión con Mención en Finanzas y Contabilidad en la misma universidad, y luego un Diplomado en Impuestos en la Universidad de Chile. Tengo 17 años de experiencia realizando auditorías de estados financieros y asesorías, atendiendo principalmente a clientes de las industrias de servicios y manufactura.

Parte importante de mi carrera la desarrollé en EY, como ejecutivo del área de Mercado Privado. También soy profesor de la Escuela de Negocios de la Universidad Andrés Bello y Perito Contable acreditado en las cortes de Santiago, San Miguel y Rancagua.

Francisco Hernández

Francisco Hernández R.

Socio

Soy Contador Auditor y Diplomado en Gestión financiera y de empresas de la Universidad de Chile. Llevo más de 25 de años trabajando en auditorías y asesorías financieras, lo que me ha permitido ganar una vasta experiencia apoyando, acompañando y solucionando los problemas de mis clientes.

Antes de embarcarme en el desafío de formar AHD, fui ejecutivo en EY, donde tuve la responsabilidad de dirigir auditorías a empresas nacionales y extranjeras y de diversas industrias.

Gonzalo Aballay A.

Socio

Comencé mi camino como Contador Auditor y posteriormente realicé un Magíster en Gestión con Mención en Finanzas y Contabilidad en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, hace ya 21 años. Hasta ahora ha sido un recorrido muy valioso y con mucho aprendizaje. En este recorrido he realizado auditorías y asesorías a clientes de diversos tamaños e industrias, lo que me ha permitido ir conociendo los distintos entornos y desafíos que enfrentan las empresas.

Desarrolle mi carrera profesional por casi 15 años como ejecutivo en EY hasta fundar AHD donde actualmente actúo como socio líder de la firma.

Manuel Escobar

Manuel Escobar B.

Socio

Soy Contador Auditor y Magíster en Gestión con mención en finanzas de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, con más de 18 años de experiencia en donde he participado en auditorías y asesorías tributarias a prestigiosas empresas e instituciones de diversos rubros, tanto nacionales como internacionales.

Junto con la consultoría, dedico parte de mi tiempo a la academia, como profesor en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y otras instituciones de educación superior.